El motel pertenece a una cadena. No sé si es garantía de algo. Pero es confortable. En el desayuno disfruto con esas pequeñas cosas que parecen formar parte del american way of life. Cafetazos que se pueden rellenar hasta la saciedad. Chocolatinas. Unidades individuales de cereales. Bajan unos tipos y empiezan a sacar hielo de una máquina y a cubrir las cocacolas de una neverita. Sí, el hielo es algo esencial en USA.
Luego llega otro con una bolsa en la que perfectamente puede haber una recortada. Coge un plátano y se va. Con sus gafas de aviador. Un tipo fibroso. Que no dice nada a nadie. Probablemente sea un asesino en serie que va a hacer su trabajo. Todo el mundo tiene derecho a trabajar. Todo el mundo tiene su oportunidad aquí en América.